El dato y el contexto (*)
MARTÍN AGUIRRE / Lo que la sociedad en general, y los
políticos en particular no terminan de entender, es que la comunicación global hoy, a partir de la ruptura generada por las plataformas como
Facebook y Google es un verdadero mar revuelto. Donde ganan los
agitadores e inescrupulosos. Donde los que buscan trabajar con
responsabilidad, quedan a la deriva en un ecosistema que privilegia el
escándalo y el miedo. Donde sin medios fuertes que puedan bajar la pelota y ordenar el debate, las pasiones populares azuzadas desde las redes, potencian a los políticos “chantas” y a los fanáticos.+