Los detalles de la corrupción detrás de la guerra en Ucrania: Habla Andrii Telizhenko, ex diplomático y político ucraniano
ANDRII TELIZHENKO / Esta guerra, como hemos hablado todo este tiempo, fue pre-arreglada. Querían que Rusia se mostrara e invadiera Ucrania y que expusiera la sangre entre los ucranianos. Estuvieron preparando a Ucrania para esta guerra durante nueve años, porque yo viví en Ucrania. Los ucranianos empezaron a odiar a los rusos cada día más, a pesar de que somos de la misma sangre, somos el mismo pueblo+
¿Hasta dónde llega la corrupción?
JEFFREY TUCKER / El colapso de FTX no es sólo otra estafa de criptomonedas que quiebra debido a los cambios en los precios del mercado. En su breve vida de tres años, que se extiende de 2019 a 2022, se convirtió en la segunda bolsa de criptomonedas más grande del planeta, con miles de millones de financiación de riesgo, y un millón de clientes.
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La ilusión de la medicina basada en la evidencia
JUREIDINI y McHENRY / Aunque las universidades siempre han sido instituciones de élite propensas a influir en base a las financiaciones que reciben, durante mucho tiempo han pretendido ser guardianes de la verdad y la conciencia moral de la sociedad. Pero ante la insuficiente financiación gubernamental, han adoptado un enfoque neoliberal de mercado, buscando activamente la financiación farmacéutica en términos comerciales. Como resultado, los departamentos universitarios se convierten en instrumentos de la industria +
Cómo un multimillonario ucraniano financió a Hunter Biden, al presidente Volodymyr Zelensky y al batallón neonazi Azov
KANEKOA THE GREAT/ El verdadero benefactor y jefe del hijo del vicepresidente Joe Biden, Hunter Biden, en la compañía de gas ucraniana Burisma Holdings, no fue el director general de Burisma Holdings, Mykola Zlochevsky, sino que fue Ihor Kolomoisky+
La corrupción más transparente
RAMÓN PARAVÍS / Cosa patética es el político que proclama con bombos y platillos que cumplirá o cumplió la ley, como si hubiera tenido que descartar, dolorosamente, otros posibles escenarios; y, más patético aún, el distraído que lo aplaude. Los dos ignoran o juegan a ignorar que la ley -el dispositivo obligatorio que una sociedad conviene- no es el techo ético al que ese pueblo aspira, sino el piso. +