POIESIS / 67

Por Luis López

El ejercicio de la poesía no supone necesariamente teorizar sobre poesía. Desde luego, la práctica convencional en España de lo que se ha dado en calificar como metapoesía desde los años ochenta desmiente, más que confirma, tal suposición.

No así en Miguel Floriano. Su poesía, utilizando una idea foucaultiana que me parece oportuna, es el palimpsesto hermenéutico que reelabora sobre su propia obra una subjetividad escribiente que se observa a sí misma en el proceso creador.

Creo conveniente señalar que se trata de un autor enormemente interesado en ese terreno epistemológicamente ambiguo que es la teoría de la literatura, porque es muy posible que ese sea el origen mismo de su forma de hacer, y sin duda es el cañamazo sobre el que va desarrollando una obra de indudable coherencia.

Considerar la poesía de este modo es llevar a cabo en cada poema un riguroso juicio no sólo estético, sino también ético. Si como palimpsesto el poema resulta (sobre una posible claridad) necesariamente complejo en su interpretación, como examen de conciencia adquiere un innegable tinte sombrío.

En estas breves notas, por último, quisiera dejar constancia de la impresión de melancolía que, como lector, me deja la poesía de Floriano. Posiblemente en sus primeros libros fue celebratoria (a la manera de su admirado Claudio Rodríguez), pero ahora es, sobre todo, expresión de sobrecogimiento al saberse solo, definitivamente, ante (y en) el discurso.


Poemas-para-extramuros


Miguel Floriano (Oviedo, 1992) ha publicado los libros de poemas Quizá el fervor (Isla de Siltolá, 2015), Claudicaciones (Renacimiento, 2016), La materia y la envidia (Alhulia, 2019), que fue reconocido con el XII Premio Antonio Gala de Poesía, y Mapas del vagabundo (Siltolá, 2022). Sus versos se incluyen en las antologías Diversos (Círculo de Valdediós, 2015), Re-generación (Valparaíso, 2016) Mucho por venir (Maremágnum, 2017), La luz a ti debida (Maremágnum, 2017) y Los últimos del XX (Luna de Abajo, 2020). Ha preparado, junto al poeta Antonio Rivero Machina, la antología Nacer en otro tiempo (Renacimiento, 2016). Colabora y ejerce esporádicamente la crítica literaria en diversas plataformas y publicaciones. Vive en Oviedo.